Dile adiós a las hornillas quemadas, con cochambre o con restos de cocina y aprende a limpiar los quemadores de la estufa para que luzcan como nuevos.
Porque a veces tallar y tallar no es suficiente para que la estufa de tu cocina quede reluciente, el cochambre, la suciedad, grasa, polvo y demás siempre hacen de las suyas y parece que quieren quedarse pegados para siempre. Aquí te daremos algunas soluciones para limpiar los quemadores de la estufa y queden como nuevos.
Aprende a limpiar los quemadores de la estufa con estos 3 fáciles métodos
Los quemadores u hornillas de la estufa son de las piezas que más se ensucian al momento de cocinar, ya que el fuego, la comida que llega a caer, el calor hace que se forme una capa inmediata de suciedad, más que en otras piezas de esta misma.
Método 1:
Necesitarás: Agua caliente y jabón líquido o detergente para trastes
Procedimiento:
- Haz una mezcla de agua caliente y jabón.
- Retira las rejillas y talla con una esponja antirayas o una fibra especial que no dañe la superficie de tu estufa.
- Seca bien.
Método 2:
Necesitarás: Amoníaco o vinagre blanco, toallas de cocina, plástico film, agua caliente, jabón líquido lavatrastes.
Procedimiento:
- Cubre las manchas con toallas de papel.
- Añade amoníaco o vinagre encima.
- Cubre con plástico film para que la humedad no se evapore.
- Deja actuar por unas horas.
- Haz una mezcla con agua caliente y detergente.
- Limpia toda la superficie con esa mezcla y después con un trapo limpio.
Método 3:
Necesitarás: Bicarbonato de sodio y agua hirviendo
Procedimiento:
- Safa las hornillas de la estufa.
- Esparce el bicarbonato por los quemadores u hornillas.
- Vierte el agua hirviendo.
- Deja actuar por 30 minutos.
- Enjuaga y seca.
NOTA: Es importante desmontar los quemadores, ya que debajo se puede acumular cochambre y comida, provocando olores desagradables; limpia el resto de tu estufa con una mezcla de jabón lavatrastes, agua caliente y un chorrito de vinagre si lo deseas.
¡Ya no tienes pretextos para que tu estufa no quede como nueva!
Fuente: Cocinavital